Se llevó a cabo la sesión “Generalidades de Radioterapia” en el Hospital San José de Querétaro, impartida por la Radio Oncóloga, Marina Adriana Velázquez Hernández, donde explicó las técnicas de radioterapia, cómo funciona un acelerador lineal, cómo se originan los Rayos X, una radioterapia o un ciberknife, así como bases de cómo tratar las lesiones intracraneanas con radiación.
La radioterapia es la propagación de energía desde una fuente radioactiva a otro medio, a través de partículas o radiación electromagnética; con el fin de dar control local a zonas donde se encuentren ubicados tumores.
Es importante mencionar que, la radioterapia, junto con la cirugía y la quimioterapia permite brindar un mejor control de vida a los pacientes, resaltando que la atención de tumores se debe de atender desde varias disciplinas de la medicina.
Al recibir esta técnica, los pacientes no padecen dolor o perciben algo con sus sentidos, dado que no se siente, no se ve y es como tomarse una radiografía. Además, de quien recibe este tratamiento no queda radioactivo, por lo que no debe existir preocupación sobre si se puede contaminar a algún familiar o menor de edad tras ser atendido por esta técnica médica.
El tratamiento por radioterapia, comentó, se hace a través de un acelerador lineal.
El principal uso de la radioterapia en la medicina, es el tratamiento de tumores como cáncer de recto, mama, próstata, lesiones intracraneanas o pulmonares, cáncer gástrico y hepático; aunque sí mencionó que existen algunas patologías benignas que se pueden ver beneficiadas con la radiación.
También puede ser utilizada para el tratamiento de cicatrices queloides, brindando una mejor estética y cierre de las heridas por medio de terapia superficial. Otra aplicación también es para el tratamiento de sinovitis (inflamación en articulaciones sinoviales), donde con la radiación se observan grandes mejorías.
Para determinar cuánta radiación recibe un paciente, existe una unidad de medición de la radiación que se llama Gray (Gy), donde 1 GY es igual o equivalente a 1 Joule/Kg de materia irradiada.
Mariana Velázquez señaló que existen diversos fraccionamientos (estándares de radiación) que se indican a cada paciente de acuerdo a su padecimiento, donde el más normal es el Normofraccionamiento, en el cual cada paciente puede recibir de 1.8 Gy a 2 Gy por sesión por día; pudiendo, de acuerdo a la lesión, requerir desde 10 sesiones hasta 33 sesiones.
Lo que implica que un paciente puede requerir acudir a sesiones de radiación 10 días, 25 días, 30 días; siempre dependiendo de las indicaciones del especialista.
Existen radiaciones o dosis mayores que está comprobado que no representan toxicidad y que se utilizan para atender tumores específicos, siempre recordando que se atiende a pacientes, no a enfermedades, por lo que cada caso es único en su modelo de tratamiento y número de Gy requeridos.
Estos pueden ser:
Es importante resaltar, que la radioterapia sólo es una parte del tratamiento que recibe un paciente oncológico, dado que la persona debe ser atendida por un equipo de oncólogos: el quirúrgico, el de quimioterapia y el radio oncólogo.
El tumor, en su mayoría por su localización o histología (del tipo de células por las que está formado), necesita las tres modalidades de tratamiento; sin existir un orden específico para ellos, dado que cómo mencionó anteriormente, este tratamiento dependerá de las necesidades de cada caso.
Es importante que el paciente debe de recibir la información necesaria y suficiente para saber cuál será el tratamiento a seguir, específicamente si va a recibir radiación o no, o sí será antes o después de las otras terapias.
Es el tratamiento de lesiones por medio de una dosis de radiación extrema, lo equivalente a más de 12 Gy por sesión, dependiendo de la lesión, pudiendo dividirse en dosis únicas o varias sesiones donde la dosis de radiación es grande y la finalidad es tratar de manera más rápida a los pacientes cuando los casos así lo requieran.
Para determinar la cantidad de radiación necesaria por cada paciente, se debe valorar su estado de salud, estado funcional, así como la disposición de plataformas para brindar cada tratamiento específico.
Fuente: Enseñanza